Desencanto



Yo quisiera quererte como antes te quería, 
y sentirte, como antes, en todo consecuente, 
yo quisiera decirte: te quiero todavía... 
y recibirte, al fin, con ánimo sonriente.

Yo quisiera tomar tu mano con la mía, 
y llevarlas fraternas, como antes, a mi frente, 
guardándote a mi lado, junto a mí todo el día, 
saber que estás conmigo, aunque te halles ausente.

Pero ya no es posible que esta dicha suceda— 
desde que el desencanto se apoderó del alma— 
y pienso que vivir así, tampoco pueda...

porque quiero querer y mi amor se resiste, 
porque quiero esperar, cuando no tengo calma, 
porque quiero reír y por siempre estoy triste.


Marilina Rébora

No hay comentarios.:

Publicar un comentario